FISICA CUÁNTICA: RECONCILIANDO CIENCIA Y ESPIRITUALIDAD
Ciencia y Espiritualidad
|
|
.
MISTICISMO Y FÍSICA CUÁNTICA |
|
La esperada unión entre ciencia
y espiritualidad ya está aquí para cambiar la manera en la que
definimos la realidad de la existencia.
|
NOTA ORIGINAL PUBLICADA EN LA REVISTA EL PLANETA URBANO, SECCION PLANETA-X
.
Artículo de Brad Hunter
.
Durante centurias las religiones y la ciencia ortodoxa tomaron el
control del conocimiento para dividirlo, en una feroz competencia, entre
la religiosidad de la Iglesia y el materialismo de la ciencia. Así fue
como toda la dinámica universal se consideró un inmenso mecanismo
predecible y en el que el hombre no tenía incidencia. Todo estaba en
manos de Dios, arbitrando una puja eterna en su creación: entre el bien y
el mal, el caos y el orden. Mucho se habla en estos días sobre la
Física Cuántica, pero en definitiva, ¿qué es la Física Cuántica? Si
comparamos a la Física Cuántica con un sistema monetario basado en el
peso, la unidad mínima de dicho sistema es el centavo. La llamada Física
Clásica se encargaría entonces de estudiar el sistema a partir de la
unidad peso (átomo) mientras que la Física Cuántica lo haría a partir
del centavo (cuanto). Entonces esto puede llevarnos a definirla como una
ciencia subatómica. La Física Cuántica comienza a abrir un nuevo camino
al conocimiento verdadero reconociendo la divinidad en nosotros mismos y
el poder de co-creación que todos poseemos. El hombre dejó de ser un
“astronauta” del destino para darse cuenta de que puede elegir y crear
de forma consciente cómo quiere interrelacionarse con la realidad.
.
TODO ES LUZ
El término cuántico proviene de quantum, que es la unidad más pequeña
que constituye la luz. Los experimentos llevados a cabo en los más
avanzados laboratorios que estudian la física de partículas han
demostrado que, en el nivel más pequeño de la materia, el nivel de las
partículas elementales, todo es energía. Para comprenderlo mejor digamos
que la materia es luz condensada. En los laboratorios se descubrió que
las partículas y antipartículas se aniquilan entre sí, dando lugar a la
aparición de la energía radiante y de la pura energía. En el mundo
cuántico surgen procesos de creación y destrucción, demostración
científica de que energía y materia no son más que dos polos de la misma
esencia, de una única sustancia universal. El hombre mismo está formado
de esta misma sustancia universal: luz pura y radiante. Cada uno de
nosotros es un sistema de energías en vibración continua. Es decir que
las moléculas de que se compone cualquier clase de materia, inclusive
nuestros cuerpos, están en constante vibración. Nuestros cuerpos crean,
entonces, bandas de energía electromagnética con una determinada
amplitud de onda que les permite, al mismo tiempo, emitir y absorber
información. Así estamos en continua comunicación con una matriz
cuántica universal de carácter holográfico.
CURACION CUANTICA
Este descubrimiento está abriendo las puertas a una nueva terapia de
curación que no es física, sino de carácter energético. Durante la
segunda mitad del siglo XX, Herbert Fröhlich y Fritz Popp estudiaron
este patrón energético de los seres vivos. Se descubrió por entonces que
las moléculas vibran al unísono y se comportan como una sola
supermolécula, estableciendo un patrón energético coherente y único. Así
se pudo detectar una emisión lumínica por parte de los átomos similar a
la de un láser. La misma fue conocida con el nombre de “radiación
mitogenética de láser” y constituye la clave para asegurar que el ser
humano es un complejo cuántico que posee la capacidad de conexión e
interacción con el universo; y que su equilibrio, bienestar y salud
dependen -como en el caso de una conexión a internet-, de la calidad de
recepción y emisión de dicha señal. Para favorecer esta coherencia se
puede interaccionar con estos campos sutiles de energía mediante
terapias que utilizan luz, escalas cromáticas y frecuencias de sonido
que ayudan a reestablecer la comunicación con la matrix.
LAS PROPIEDADES HOLOGRAFICAS
El campo energético biofotónico es holográfico, por lo que posee la
propiedad de que la parte (individuo) contiene la información del
Holograma completo (Todo). Existe una conectividad instantánea entre la
parte y el resto de las otras partes, y entre las partes con el
Holograma entero. Aquello que promulga el misticismo que reza “descubrí
la verdad dentro tuyo” es una verdad irrefutable en la teoría del
Holograma Cuántico. Esta propiedad de no-localidad de información es un
principio postulado por la dinámica cuántica en el Teorema de Bell y
demostrada en el primer experimento realizado al respecto en el espacio
por el astronauta Edgar Mitchell en su misión del Apolo XIV. Nuestro
Universo sería un gigantesco almacén de información al que puede
accederse desde cualquier otro lugar del universo en cualquier momento
que se desee. Al igual que un ordenador central de una red informática,
toda la información queda almacenada en un disco rígido al que puede
accederse desde cualquier computadora del sistema cuando el operario lo
considere oportuno.
UNA PROPIEDAD FUNDAMENTAL: LA CONCIENCIA
Puede afirmarse que nuestro cuerpo contiene, entonces, un patrón
holográfico de energía que trasciende el marco conceptual de la energía
física, ya que sería energía consciente. A niveles cuánticos, la
conciencia es parte integrante, esto significa que la realidad cuántica
no es objetiva; entonces el observador forma parte de la realidad y
tiene incidencia sobre la misma. Esto puede comprenderse bajo un
principio clásico de la dinámica cuántica, el de la dualidad
onda-partícula: el observador, con el simple acto de observar, determina
el estado de la función en onda o en partícula. La visión es una
propiedad de la conciencia, entonces la conciencia co-crea lo que
observamos. Somos partícipes de un mundo cuántico que cambia de estado
de acuerdo a los observadores-participantes de la realidad. La dinámica
cuántica es un pilar clave en la unión entre la materia y la conciencia,
estableciendo una nueva concepción de nosotros mismos. La dualidad de
la existencia onda-partícula (o bien energía-materia) está entonces
determinada por nuestra observación. A esto habría que agregarle que el
perceptor (sujeto) y la fuente de emisión (objeto) están en una
interrelación de resonancia conocida con las siglas PCAR, que permite
que la información sea adecuadamente recibida. Esto puede simplificarse
asegurando que cada individuo recibe la información que merece o puede
entender de acuerdo con su nivel de comprensión y asimilación consciente
de recepción. Este proceso calificado de información y regido por
ciclos resonantes de retroalimentación es conocido como Bio-Feed Back.
UNIVERSO VIVIENTE
Si evaluamos la conciencia como un campo matriz podemos especular que
el Universo se comporta como un ser vivo. James E. Lovelock fue quien
postuló el concepto de la Tierra como un ser vivo, con esencia vital y
conciencia. La naturaleza geométrica de la naturaleza, la cual se
expande fractalmente, puede aplicarse a nuestro universo y a las leyes
que lo rigen. El universo completo podría imaginarse como un gigantesco
fractal expandiéndose permanentemente dentro de una matriz energética
consciente. Uno de los aspectos cruciales de la comprensión filosófica
de la dinámica cuántica es responder a la siguiente pregunta: ¿Qué es lo
que mantiene a la luz “condensada” en materia? Queda claro que los
procesos cuánticos no son, por sí solos, capaces de mantener la
continuidad de la luz en materia. Una de las explicaciones la dio uno de
los padres de la física cuántica, Max Planck, al declarar que detrás de
la realidad física debe existir una mente consciente que le permita
existir. Entonces, detrás de este gigantesco universo debe existir
también una gigantesca mente consciente que le da vida y le permite
existir materialmente. Como decía el genial escritor Jorge Luis Borges:
“Somos pensamientos en la mente de un gigante”.
Por Brad Hunter
_______________Compilado por Freeman